lunes, 12 de abril de 2010

DVI: Caminando entre la urdimbre.

Alejandro Abt

Caminando por la calle uno se encuentra con todo tipo de gente. Está ese de pecho inflado, hombros robustos y severa seguridad en cada gesto. Ese que tiene la certeza impermeable de que tiene todo bajo control, la vida sobre rieles y siempre te canta la justa. Caminando te cruzás también con el inseguro, quizás bajo unas gafas de marco negro y exageradamente grandes, tal vez un poco pelado, rellenito, que vivió la vida como él quería pero no se amoldó a los estándares y hoy que quiere, no puede -y le duele-, pero se conforma sabiendo que no hay vuelta atrás. También está el anti, el rebelde. Ese que puede hacerlo desde una sonrisa o desde el resentimiento, el clown y el punk. Todos ellos, a su vez, amados, amantes, drogadictos, borrachos, felices, amigos, distantes, hijos, hermanos y padres. Varios, bastante hijos de puta. Cada uno comprando su visa a la tolerancia que se da a pagar en cuotas eternas de felicidad. Caminando por la calle, entre las sombras que proyectan los edificios, bajo los nefastos avisos publicitarios que tapan el sol y el horizonte y entre la jauría hambrienta que cree que le dan de comer de la mano cuando en realidad es víctima de su propia carnada, nos perdemos momentos de paz. Compramos una cosa. Una sola. En cuotas. Y subsistimos. Así envejecemos, con esa compra tan hermosa que nos dio una razón para vivir. Al menos una. No vale de nada vivir la eternidad girando sobre engranajes ajenos que sabemos equivocados. No vale nada seguir caminando un camino seguro que no se disfruta, aunque lleve a un futuro más certero. No vale tampoco quedarse al márgen de compartir la felicidad con otros. Pero tampoco no alcanzarla o perderla en cuotas por esa sola atadura al mundo de la hipocresía. Happiness only real when shared.

2 comentarios:

Edgardo dijo...

"la felicidad solo es real cuando se la comparte"... lástima que cuando toma conciencia de ello, ya era demasiado tarde. Excelente publicación y una de las mejores películas que ví en mi vida!

Mauro Fernández dijo...

Gracias Edgardo. Sí, para mi Into the Wild también fue una de las mejores películas que ví, por la búsqueda que relata, más que por la película en sí misma.

Gracias por pasar.
Saludos.