domingo, 26 de febrero de 2012

Las Causas



Los ponientes y las generaciones.
Los días y ninguno fue el primero.
La frescura del agua en la garganta de Adán.
El ordenado Paraíso.
El ojo descifrando la tiniebla.
El amor de los lobos en el alba.
La palabra. El hexámetro. El espejo.
La Torre de Babel y la soberbia.
La luna que miraban los caldeos.
Las arenas innúmeras del Ganges.
Chuang-Tzu y la mariposa que lo sueña.
Las manzanas de oro de las islas.
Los pasos del errante laberinto.
El infinito lienzo de Penélope.
El tiempo circular de los estoicos.
La moneda en la boca del que ha muerto.
El peso de la espada en la balanza.
Cada gota de agua en la clepsidra.
Las águilas, los fastos, las legiones.
César en la mañana de Farsalia.
La sombra de las cruces en la tierra.
El ajedrez y el álgebra del persa.
Los rastros de las largas migraciones.
La conquista de reinos por la espada.
La brújula incesante. El mar abierto.
El eco del reloj en la memoria.
El rey ajusticiado por el hacha.
El polvo incalculable que fue ejércitos.
La voz del ruiseñor en Dinamarca.
La escrupulosa línea del calígrafo.
El rostro del suicida en el espejo.
El naipe del tahúr. El oro ávido.
Las formas de la nube en el desierto.
Cada arabesco del calidoscopio.
Cada remordimiento y cada lágrima.
Se precisaron todas esas cosas
para que nuestras manos se encontraran.


Las Causas
Jorge Luis Borges


"Pero sería mejor cambiar el último verso. ¿No sería mejor que nuestras manos se buscaran? ¿No sería mejor? Para encontrarse tienen que buscarse, por que sino, no tendría ningún valor. Tocar una mano casualmente no vale nada" 

Conversaciones con Antonio Carrizo. 1979.

4 comentarios:

Martin Katz dijo...

No cambiaría el último verso ya que no creo que las casualidades sean tales, ni me creo conocedor de todas las causalidades del Universo.

Mauro Fernández dijo...

Con dos citas, reafirmo tu realismo mágico, Katz:

"Andábamos sin buscarnos pero sabiendo que andábamos para encontrarnos", Julio.

"Uno no tiene que buscar lo que quiere, sino querer lo que está buscando", Christiane Dosne Pasqualini.

No quita que uno busque empecinadamente, pero los encuentros no son otra cosa que la reafirmación de nuestra ignorancia en la búsqueda.

Abrazo.

Gustavo dijo...

Bueno mas alla que que nuestras manos se busquen o encuentren lo que importa es que se sientan. Por ahi uno encuentra una mano y en lla no hay nada. Ninguna emocion, ningun sentimiento. Lo importante es que haya manos gon ganas de juntarse y hacer

Mauro Fernández dijo...

Así es. Sea cual fuera la causa, las ganas son el mejor combustible de la pasión.